Motivación basada en el miedo

El miedo puede ser un catalizador eficaz para la motivación.

Por ejemplo, si su jefe le dice que termine su proyecto a tiempo o perderá su trabajo, puede estar seguro de que hará todo lo que esté a su alcance para terminar ese proyecto. Puede estar resentido con su jefe por hacer esto, pero probablemente hará lo que él o ella deseen a menos que esté buscando que lo despidan.

Otra situación en la que el miedo te motivará es cuando algo crucial se rompa en tu hogar o se salga fuera  de lo normal. Podría ser el horno apagándose en pleno invierno. Está en un punto en el que no tiene más remedio que solicitar reparaciones costosas. Si no lo hace, corre el riesgo de que las tuberías se congelen y sean incómodas.

Todos tenemos una cierta cantidad de motivación basada en el miedo.

 Pero, ¿es la mejor forma de conseguir que la gente haga las cosas? En el caso del horno, no tendrá otra opción y tendrá que atribuirlo a ser parte de la vida. Pero, en el caso de que su jefe le insista, ¿hay una mejor manera de manejar la situación? ¿Puedes trabajar continuamente en un entorno basado en ese tipo de miedo?

Es cuestionable si la motivación basada en el miedo es sostenible.

Si es un empleado y no hay muchos trabajos disponibles como alternativas, puede sentir que no tiene más remedio que cumplir. Pero, a veces, este tipo de ambiente de trabajo negativo hace que las personas estén más motivadas para salir de la situación. En otras palabras, las tácticas de motivación pueden funcionar a corto plazo, pero eventualmente, los empleadores pueden experimentar una alta rotación cuando esos empleados reconocen que hay otras opciones. Internet es un gran ecualizador en este sentido, ya que más personas pueden optar por trabajar por cuenta propia en sus términos.

Hay un viejo dicho sobre cómo atrapas más moscas con miel. Si los gerentes reconocieran que obtendrían más lealtad de las personas al ofrecer incentivos en lugar de tácticas de miedo para que sus empleados hicieran el trabajo, tal vez la rotación no sería tan alta. Desafortunadamente, estos gerentes no aprenden esto hasta que es demasiado tarde. E incluso entonces, ¿harán algún cambio? A menudo, justifican que es culpa del empleado y decidió irse.

Piense en el impacto que tiene si es un gerente que intenta motivar a sus empleados. Si ha utilizado el miedo como motivador, ¿es algo que le ha funcionado a largo plazo? ¿O simplemente estableciste un entorno en el que la gente no podía esperar para salir?